Como estudiar un texto
Como estudiar un texto
Para estudiar un tema correctamente, lo primero que debemos hacer es definir con claridad a partir de que fuente o material vamos a estudiar. No tomar un poco de temas de cada una de ellas sino procurar siempre que sea una sola fuente y la mejor de ellas. De este modo vamos garantizar un mayor nivel de atención y de concentración.
Un segundo punto a tener en cuenta respecto a como estudiar un texto es hacer el ejercicio de la PREVISUALIZACIÓN. Esto es mirar rápidamente, antes de comenzar la primera lectura del material, los indicadores visuales de lo que vamos a leer. Ellos pueden ser títulos, subtítulos, recuadros, negritas, letras en otro tamaño, etc. Nos ayuda a captar visualmente con mayor facilidad donde podemos encontrar las ideas esenciales de un texto.
Un tercer elemento a considerar es otorgar importancia a COMPRENDER lo que leemos. Sin comprensión no es posible estudiar un texto, ya que estudiar no es memorizar. Estudiar es comprender y relacionar. Si no comprendemos las ideas, no habrá relación posible entre ellas. En cambio, cuando entendemos lo que leemos, simplificamos enormemente la tarea del estudio.
En cuarto lugar, los COMIENZOS de cada párrafo siempre nos orientan acerca de cuando una idea comienza, continua o termina. Debemos recordar que todo texto presenta las ideas en bloques, en grupos, en los cuales el primer párrafo introduce un tema, los siguientes lo desarrollan y el último suele cerrar del desarrollo del concepto. Si nos acostumbramos a ver aquellas palabras utilizadas en los comienzos de cada párrafo, ubicar los grupos de ideas será mucho más sencillo.
Algunos ejemplos de las palabras con las que puede comenzar cada párrafo son: primeramente, además, no obstante, puesto que, por consiguiente, sin embargo, etc. Con la práctica suficiente lograremos casi sin darnos cuenta saber donde una idea comienza y donde termina, lo que simplificará mucho nuestro estudio.
Otro factor que ayuda mucho a estudiar un texto correctamente es colocar tiempos límite para el estudio. Aun teniendo todo el tiempo del mundo, siempre es mejor que establezcamos desde el inicio el horario de comienzo y el horario de final para leer y estudiar un texto. De este modo será más sencillo lograr una mejor concentración y aprovecharemos mejor nuestro tiempo disponible.
